Distribución

Narciso Casado: Digitalización de las mipymes el reto pendiente para la economía mexicana en 2025

Expertos del Consejo Empresarial Iberoamericano de la Mipyme (CEIB) advierten que la brecha digital entre países de la región sigue siendo un desafío.

Las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) mexicanas siguen enfrentándose en  la digitalización. Para Narciso Casado, secretario permanente del Consejo Empresarial Iberoamericano de la Mipyme (CEIB), el camino hacia la transformación digital no es uniforme en Iberoamérica, de acuerdo con el vocero “el nivel de digitalización de las mipymes en Iberoamérica es desigual, con ciertos países liderando la transformación y otros aún enfrentando barreras significativas”, añadiendo que en México a pesar de los esfuerzos gubernamentales y sectoriales, el país se encuentra ante una etapa de adopción progresiva.

Más del 95 % de las empresas mexicanas son mipymes, lo que convierte su transición digital en un factor crítico para la competitividad nacional, pues la necesidad de adoptar nuevas tecnologías, desde la nube hasta la inteligencia artificial, se convirtió en un imperativo no solo para crecer, sino para sobrevivir en el mercado.

Un estudio regional, más del 70 % de las mipymes en América Latina aún operan con bajos niveles de madurez digital, debido a obstáculos como la conectividad limitada, la escasez de talento especializado y el acceso restringido a financiamiento. En el caso mexicano, el INEGI señala que las micro, pequeñas y medianas empresas representan el 99.8 % del total de los establecimientos del país, lo que hace de su digitalización una prioridad nacional.

La comunicación interna efectiva es clave para mejorar la productividad en las PYMEs. Empresas con estrategias claras pueden aumentar su eficiencia hasta en un 25%.
La comunicación interna efectiva es clave para mejorar la productividad en las PYMEs. Empresas con estrategias claras pueden aumentar su eficiencia hasta en un 25%.

Los principales obstáculos: financiamiento, capacitación e infraestructura

Casado reconoce que las mipymes “no lo tienen fácil”. Entre las principales barreras menciona “la falta de acceso a recursos y financiamiento adecuado para la adopción tecnológica, la ausencia de capacitación para gestionar herramientas digitales, y la resistencia al cambio”. A esto se suma “la escasa infraestructura digital en determinadas zonas, especialmente en áreas rurales o menos desarrolladas”.

Datos del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) respaldan esta visión: el 65.6% de las mipymes mexicanas solo tiene un conocimiento básico sobre sus actividades digitales y apenas el 21.2 % capacitó a su personal en el uso de herramientas tecnológicas en los últimos dos años. Además, un informe de CAINTRA revela que, aunque el 33% de las empresas espera mejorar su eficiencia operativa gracias a la tecnología y el 32% aumentar sus ventas, muchas siguen enfrentando déficits de infraestructura y personal calificado.

México y el impulso digital tras la pandemia

Uno de los factores decisivos en la aceleración de este proceso fue la pandemia. “La pandemia aceleró la digitalización de las mipymes en México y en el resto del espacio iberoamericano, enseñando lecciones clave sobre resiliencia y adaptabilidad”, destaca Casado.

Muchas empresas que dependían de modelos tradicionales como el comercio físico se vieron obligadas a migrar al comercio electrónico y al teletrabajo para sobrevivir. “Este cambio les permitió no solo mantenerse activas, sino también ampliar su nicho de mercado, demostrando cómo la digitalización puede abrir nuevas oportunidades de crecimiento.

Entre 2018 y 2023, el porcentaje de mipymes mexicanas que venden por internet pasó del 18.7% al 28.8%, a su vez, un estudio del IMEF indica que el 80% de las mipymes aumentó el uso de herramientas digitales desde 2020, con mejoras de 20 % en productividad y reducciones de 15 % en costos.

Casado también resalta el papel de la colaboración público-privada: “El apoyo conjunto entre el Gobierno y el sector privado, mediante créditos y programas de formación, facilitó la transición de muchas empresas hacia el entorno digital.” No obstante, recuerda que aún persisten brechas importantes, especialmente en materia de conectividad rural.

Solo el 30% de las empresas mexicanas cuentan con sistemas de seguridad electrónica, lo que impulsa la adopción de inteligencia artificial en la seguridad del retail para cerrar la brecha.

Política pública mexicana: avances y oportunidades

Desde el CEIB, la valoración de los esfuerzos del gobierno mexicano es positiva, aunque Casado señala que todavía hay terreno por aprovechar. “México ha hecho grandes avances, pero el acceso a financiamiento, la infraestructura tecnológica y la capacitación continua siguen siendo áreas de oportunidad.”

Se estima que el 76 % de las mipymes mexicanas aún no participa activamente en la economía digital, según el IFT. Este rezago limita su competitividad frente a empresas más grandes o internacionales. “Las mipymes que no adopten la digitalización corren el riesgo de quedar obsoletas, perder competitividad e incluso desaparecer”, advierte Casado.

Mientras que para la digitalización, afirma, “no es una opción, sino una necesidad para la supervivencia a largo plazo”. Por ello, el VII Foro Iberoamericano de la Mipyme, que se celebrará el 27 y 28 de noviembre en Tenerife, pondrá especial foco en este tema. Bajo el lema “Pequeñas empresas para grandes países: Territorio, Talento y Transformación”, el encuentro reunirá a expertos, autoridades y empresarios de 22 países para discutir estrategias que aceleren la transición digital.

Sectores con mayor urgencia de transformación

Si bien, el vocero identifica cuatro sectores productivos en México que requieren una digitalización urgente: comercio minorista, manufactura, agricultura y logística. En especial, el sector agroindustrial, que representa una parte significativa de la economía nacional con “un gran potencial para mejorar su eficiencia, trazabilidad y sostenibilidad mediante la adopción de tecnologías digitales”.

De igual manera, la industria manufacturera puede beneficiarse enormemente de la automatización y la inteligencia artificial, mientras que la logística clave en la era del comercio electrónico necesita sistemas más inteligentes y conectados.

Casado considera que la colaboración entre grandes empresas y mipymes es esencial para construir un ecosistema digital más inclusivo. “Las grandes compañías pueden actuar como mentoras, compartiendo experiencia, plataformas y tecnologías. Es una relación de beneficio mutuo: las mipymes ganan en innovación y las grandes corporaciones amplían sus redes de valor.”

“Mi mensaje sería: no se puede dejar pasar la oportunidad de la digitalización, porque aquellos negocios que no lo hagan corren el riesgo de quedarse atrás”, remata Casado. “Lo que se busca hoy es que existan más y mejores empresas, más formadas, digitalizadas, innovadoras y sostenibles, que generen empleo formal, desarrollo y crecimiento para nuestras sociedades.”

Lee más: 

Autor

  • Periodista de tecnología y ciencia. Ha trabajado en medios como Mundos Ejecutivo, Expansión y Tec Review. Fue la voz de Top Expansión Tecnología y ahora colabora para ITSitio. Egresada de la EPCSG en México.

    Ver todas las entradas

[mdx-adserve-bstreet region="MED"]

Ximena Leyva

Periodista de tecnología y ciencia. Ha trabajado en medios como Mundos Ejecutivo, Expansión y Tec Review. Fue la voz de Top Expansión Tecnología y ahora colabora para ITSitio. Egresada de la EPCSG en México.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba