La nostalgia se volvió tendencia: el boom retro que está conquistando a la era digital
En plena era de la inteligencia artificial, lo analógico está de regreso: vinilos, Polaroid y MySpace vuelven a brillar.
Durante años el mundo tecnológico está obsesionado con la velocidad del progreso, nuevos smartphones cada seis meses, inteligencia artificial que escribe mejor que nosotros, pantallas cada vez más delgadas y realidades cada vez más virtuales. Pero en medio de tanta innovación, algo inesperado ocurrió y es que lo viejo volvió a ponerse de moda en plena era digital. Sí, MySpace, vinilos, las Polaroid, consolas clásicas y hasta las tipografías pixeladas están reclamando su lugar en un mundo que parece haber corrido demasiado rápido.
Lo que antes era considerado obsoleto o “anticuado” hoy es sinónimo de autenticidad, nostalgia y estilo, las nuevas generaciones que crecieron entre pantallas táctiles y algoritmos, están redescubriendo la magia de lo analógico. Lo vintage ya no es un refugio de coleccionistas es una tendencia cultural global.
De MySpace a TikTok: el regreso del caos divertido
A principios de los 2000, MySpace era el centro del universo digital. Era caótico, brillante, ruidoso y completamente personalizable, tu perfil podía tener glitter, música de fondo y tu top 8 de amigos, un ranking social tan polémico como las historias de Instagram hoy.
Aunque MySpace desapareció en la ola de las nuevas redes, su espíritu libre y DIY está regresando. Plataformas como Tumblr están resurgiendo con fuerza entre los jóvenes y el diseño “early internet” se está colando en el branding de marcas y festivales.
De acuerdo con un estudio de Nostalgia Marketing Trends 2025, el 68% de los centennials afirma que siente curiosidad por redes sociales del pasado porque las perciben como “más auténticas” y “menos controladas por algoritmos. Y no solo eso, artistas emergentes están lanzando campañas inspiradas en los layouts de MySpace o en los blogs de los 2000. Lo imperfecto es el nuevo cool.

Vinilos: el sonido cálido de la nostalgia
Quizá el ejemplo más sonoro del regreso de lo vintage sean los discos de vinilo. Durante años, el streaming parecía haberlos enterrado pero hoy están de vuelta con fuerza. Según la Recording Industry Association of America (RIAA), en 2024 las ventas de vinilos superaron a las de CD por primera vez desde 1987. Taylor Swift, Billie Eilish y Arctic Monkeys encabezan las listas de artistas más vendidos… en vinilo ¿Puedes creerlo?
“Escuchar un vinilo es una experiencia física”, dice Diego Álvarez, coleccionista y dueño de una tienda de música en la Ciudad de México. “No solo se trata del sonido, sino del ritual: sacar el disco, poner la aguja, escuchar el chasquido. Es algo que Spotify no puede darte”.
Y tiene razón hoy todo está dominado por la inmediatez, sin embargo, el vinilo invita a detenerte, a disfrutar de la música con tiempo y atención. No hay skip, no hay shuffle. Solo un lado A y un lado B, como en los viejos tiempos.
Polaroid: el poder de lo imperfecto
Ahora bien, la fotografía digital prometió perfección, pero terminó dándonos ansiedad. Entre filtros, retoques y comparaciones, muchos usuarios están buscando volver al origen de capturar el momento sin editarlo.
Por eso las cámaras Polaroid están de regreso, especialmente entre los jóvenes. Su magia que tiene la simpleza de capturar, esperas unos segundos y obtienes una foto única e irrepetible. Sin likes, sin stories, sin repeticiones y lo más importante sin filtros
Polaroid, marca icónica que estuvo al borde de la bancarrota, renació gracias al movimiento “instant film revival”. En 2024, sus ventas crecieron un 35% globalmente, impulsadas por influencers y creadores de contenido que usan la estética analógica como declaración de estilo.
La moda no se queda atrás ya que marcas como Urban Outfitters y Fujifilm han lanzado ediciones limitadas inspiradas en los colores y formas retro. Lo analógico no solo vuelve: vende.

Computadoras Commodore y consolas clásicas: píxeles que nunca mueren
Los gamers nostálgicos también están reviviendo el pasado. En 2025, empresas como Nintendo, Atari y Commodore han relanzado versiones mini de sus consolas clásicas, con los juegos originales preinstalados.
La Commodore 64, lanzada originalmente en 1982, volvió al mercado en una versión actualizada con puertos USB, salida HDMI y el mismo teclado beige de siempre.
Además, plataformas de streaming como Twitch ahora cuentan con secciones dedicadas a juegos vintage, donde miles de usuarios miran a otros jugar títulos de los 80 y 90, lo que comenzó como un pasatiempo de nicho se ha convertido en un fenómeno cultural y comercial.
Detrás de este regreso masivo hay algo más profundo que el simple gusto estético y es una búsqueda de conexión emocional, las generaciones digitales como los millennials y centennials están saturadas de velocidad, métricas y pantallas. Volver a lo viejo es una forma de reconectarse con la calma, con lo tangible y con una versión más humana del mundo.
El marketing de la nostalgia ha entendido esto mejor que nadie. Marcas como Coca-Cola, Nokia y Lego han lanzado campañas que apelan a los recuerdos de infancia, combinando estética retro con innovación moderna.
Y esa emoción se traduce en números: los productos vintage o inspirados en los 80 y 90 aumentaron un 42% en búsquedas globales en 2025, según datos de Google Trends.
Quizá no se trate de rechazar la tecnología, sino de recordar su propósito original de conectarnos, emocionarnos y divertirnos. Porque, sí, lo viejo funciona, lo dice esta autora de 28 años. Y, al parecer, seguirá funcionando por mucho tiempo más.





