
Gran Berta Group: una startup con tres unidades, un sueño y un modelo en evolución
En una entrevista con este medio, Agustín Stegmann, cofundador y CEO de Gran Berta Group, repasa la evolución del estudio, su apuesta por la tecnología y la inteligencia artificial, y su objetivo más ambicioso: contar historias que generen cultura desde Argentina para el mundo.
Desde hace nueve años, Agustín Stegmann impulsa una visión clara y ambiciosa: construir una compañía que no solo cree contenido, sino que haga cultura. Como cofundador y CEO de Gran Berta Group, lidera una organización que abarca tres unidades de negocio: la creación de contenido como influencers bajo el sello Gran Berta, la producción publicitaria a través de Gran Berta Films, y un estudio de efectos visuales y postproducción llamado Bani VFX.
“Somos 13 personas”, explica Stegmann, quien organiza el trabajo de la compañía en áreas bien delimitadas. “Necesito etiquetarlo de esa manera para entender qué es cada cosa. Cada unidad tiene sus propios objetivos, su propia visión y su manera de llegar a donde quiere llegar”. Su rol es el de orientar y alinear a todo el equipo: “Lo que hago en la empresa es orientar hacia dónde vamos, por qué vamos en esa dirección y que el equipo sepa por qué hacemos lo que hacemos”.
El camino hacia la ficción
Si bien comenzaron con contenido breve para redes sociales, Stegmann y su equipo tienen una meta clara: la producción de películas y series de ficción. “Queremos hacer películas y series y de esa manera entretener y fomentar la imaginación y la creatividad”, afirma. La inspiración viene de referentes como Pixar, Disney o DreamWorks. “A mí me despertó un montón de cosas”, recuerda, “nos copa mucho contar buenas historias y de una manera que sea un desafío”.
Esta vocación por la ficción se articula principalmente desde Gran Berta Films, la productora del grupo, que por ahora se dedica a publicidad, pero con una lógica de aprendizaje. “Estamos haciendo publicidades porque es el camino para aprender a hacer producciones más grandes. No de dos o diez personas, sino de 50, 60, 100 y con presupuestos más elevados”.
Para Stegmann, el cine es una forma de generar cultura. “Con Gran Berta Film hacemos cultura”, dice sin vueltas. Y amplía: “Nuestro concepto de por qué hacemos cultura es porque estamos entreteniendo y fomentando la imaginación y la creatividad. No solamente haciendo, sino mostrando lo que hacemos”.

Un modelo de negocio en construcción
La transición hacia proyectos más ambiciosos no es sencilla. Según el CEO de Gran Berta, uno de los principales frenos es la falta de comprensión general sobre cómo financiar y escalar este tipo de producciones. “El freno es del entendimiento del modelo de negocios para mí, que varía un montón. Una película es mucha inversión de tiempo y muchos equipos involucrados”, explica. “Es difícil la coreografía durante cinco años y que salga todo perfecto”.
La apuesta de Gran Berta Group es clara: crecer desde proyectos pequeños y escalarlos, mostrando en redes sociales no solo los resultados, sino también el camino recorrido. “Porque quiero contar el camino, no solamente el resultado”, afirma Stegmann. “Lo que la gente compra es la pasión que te pueda llegar a transmitir nuestro equipo. Es un equipo de gente queriendo hacer las cosas con mucho hambre, con mucha pasión y queremos llevar el cine argentino a otro nivel”.
Tecnología, IA y storytelling
Aunque Stegmann se considera menos apasionado por la tecnología que sus socios, reconoce el impacto que las nuevas herramientas están teniendo en la industria audiovisual. “Estamos atrás principalmente con las inteligencias artificiales de contenido audiovisual”, cuenta, mencionando tecnologías como Veo 3 de Google. “Hay cosas que antes llevaban una semana o dos y hoy se pueden hacer más rápido. Tal vez con un poco menos de calidad, pero suficiente para redes sociales, donde muchas veces nadie se da cuenta”.
Su fascinación con los efectos visuales viene de larga data. Cuando fundaron Bani VFX, soñaba con emular a Industrial Light & Magic, el legendario estudio de George Lucas. “Quiero tener una empresa como Industrial Light and Magic”, dice. “Ellos tuvieron que abrir ese estudio porque no existía la tecnología, y la fueron creando”.
Hoy, el avance vertiginoso de la IA lo lleva a preguntarse cómo redefinir su rol y el de su empresa: “¿Qué historia quiero contar? Mucho más desde el lado de que soy un storyteller”. La IA, lejos de reemplazar esa vocación, parece empujarla aún más hacia el centro de la escena. “Nosotros puntualmente nos gusta la parte de contar las historias”, subraya.
IP propio y una visión a largo plazo
Una de las claves del futuro de Gran Berta Group es el desarrollo de propiedad intelectual propia. “Es reinteresante todo lo que vive atrás de generar un IP”, señala Stegmann. “Eso es hacia donde queremos ir, hacia donde estamos yendo. Y con la IP también queremos hacer cultura”.
La visión de largo plazo incluye incluso la creación de un parque temático con personajes propios. “Ojalá algún día pueda hacer un parque y que la gente quiera ir al parque de diversiones. Decís, ‘che, pero eso está en Estados Unidos’. No, nosotros queremos hacerlo acá”, asegura con entusiasmo. “Que algún día, chicos puedan vivir esas historias desde chicos, de personajes que tienen sus conflictos y los superan”.
IA y gestión de datos
Stegmann es consciente de que el crecimiento futuro requiere incorporar perfiles nuevos a su equipo. Cuando se le pregunta si necesitarán un especialista en inteligencia artificial, responde sin dudar: “Sí. Un experto en IA que va a estar en distintos campos o claramente el Chief AI Officer”.
Respecto al manejo de datos, admite que todavía están en una etapa incipiente. “Lo que tenemos es más el contenido que hacemos, que lo guardamos en la nube, pero en la nube estamos hablando de Dropbox”, señala. Aunque intentan mantener una estructura organizada de carpetas y archivos, reconoce que no cuentan con un sistema avanzado para almacenamiento o gestión de datos con herramientas de inteligencia artificial.
Con la vista puesta en el futuro, Gran Berta Group se mueve entre la creatividad, la tecnología y la pasión. Y aunque el camino no es simple, la convicción de su CEO parece inquebrantable. “Tenemos mil limitaciones, pero la pasión no es una de ellas”.
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