
OpenAI revela sus planes: ChatGPT apunta a convertirse en un «superasistente» que lo resuelve todo
Busca transformar su popular chatbot en una herramienta omnipresente, emocionalmente inteligente y capaz de asistir en cualquier tarea, desde escribir un mail hasta planificar unas vacaciones. Un documento interno detalla la estrategia para hacer de ChatGPT mucho más que un asistente conversacional.
Un documento interno recientemente filtrado titulado ChatGPT: H1 2025 Strategy ha dejado al descubierto los ambiciosos planes de OpenAI para el futuro inmediato de su asistente conversacional. La compañía detrás de ChatGPT quiere que su herramienta de inteligencia artificial deje de ser solo un chatbot avanzado para convertirse en un verdadero “superasistente”, con capacidades para ayudar a los usuarios en todo tipo de tareas cotidianas, técnicas y personales.
Según revela The Verge, que tuvo acceso exclusivo al documento, estos planes comenzaron a gestarse a principios de 2024 y forman parte de una estrategia más amplia para posicionar a ChatGPT como un aliado inteligente, emocionalmente consciente y altamente capacitado que pueda operar en cualquier entorno digital. OpenAI afirma que ya cuenta con los recursos tecnológicos, humanos y de mercado para avanzar en esta dirección.
Más allá de las respuestas: una nueva generación de asistentes
Hasta ahora, ChatGPT ha sido utilizado principalmente para responder preguntas, generar textos, programar código o resumir documentos. Sin embargo, OpenAI quiere ir mucho más allá: busca que su IA sea capaz de actuar como un experto, un consejero, un colaborador o incluso un compañero digital personalizado. En otras palabras, una entidad capaz de asistir de forma proactiva y empática a los usuarios, entendiendo sus intereses, necesidades y contexto.
La clave de esta evolución está en los avances recientes en modelos de IA como el o3, una versión más sofisticada que permite a ChatGPT ejecutar tareas con mayor fiabilidad, utilizar herramientas externas (como aplicaciones de escritorio) y razonar de forma multimodal, es decir, integrando texto, imágenes, audio y otros formatos para comprender y responder de manera más efectiva.

¿Qué es exactamente un «superasistente»?
Según la propia definición de OpenAI, un superasistente es “una entidad inteligente con habilidades en forma de T”: posee conocimientos generales para asistir en tareas comunes y, al mismo tiempo, competencias profundas en áreas complejas como programación, planificación o análisis.
Este superasistente estaría disponible en cualquier plataforma: desde navegadores web hasta apps móviles, integraciones con plataformas de terceros como Siri de Apple, e incluso dispositivos inteligentes. Su capacidad iría desde encontrar una casa o gestionar un calendario, hasta contactar con un abogado o planificar unas vacaciones. Todo, con una capa de personalización emocional que permitiría entender mejor las motivaciones y el estado de ánimo del usuario.
OpenAI destaca que la interacción con el asistente será cada vez más fluida gracias a nuevas interfaces de usuario generativas y a su enfoque multimodal, que permite elegir el canal más adecuado para cada tarea, ya sea escribiendo, hablando o mostrando imágenes.
El nuevo mapa de competencia: de chatbots a navegadores
La empresa liderada por Sam Altman no oculta a quiénes considera sus principales competidores. En el documento se menciona explícitamente a Claude (Anthropic), Gemini (Google), Copilot (Microsoft) y Meta AI (Meta) como los principales rivales en el sector de asistentes basados en IA. Sin embargo, OpenAI también apunta más alto: los motores de búsqueda, los navegadores web y, en última instancia, incluso las interacciones humanas son parte del ecosistema que buscan transformar.
“El objetivo no es construir un buscador o un navegador, sino un asistente que resuelva cada vez más casos de uso”, afirma el documento. En este sentido, el enfoque es escalar de forma progresiva, atrayendo usuarios por medio de casos de uso concretos y soluciones efectivas. Para OpenAI, la clave del éxito está en ofrecer “el mejor modelo gratuito, la mejor interfaz de usuario y la marca más fuerte”.
Un momento de oportunidad
OpenAI reconoce que el contexto actual es especialmente favorable para este salto evolutivo. Con una base de usuarios en rápido crecimiento, modelos de IA avanzados y un equipo de investigación de clase mundial, la empresa considera que tiene todas las piezas listas para posicionar a ChatGPT como el “superasistente” por excelencia.
En lugar de etiquetarlo como un sistema operativo o una nueva app, el nombre ChatGPT seguirá siendo el estandarte de esta visión. Según el documento interno, esta identidad propia permite capturar la esencia del producto sin quedar limitado por categorías tecnológicas preexistentes.
En definitiva, si los planes de OpenAI se concretan, el futuro de la asistencia digital podría cambiar radicalmente. ChatGPT ya no sería solo una herramienta para responder preguntas, sino un compañero omnipresente e inteligente, listo para colaborar con las personas en cada aspecto de su vida digital. Una evolución que promete redefinir la relación entre humanos y tecnología.
Leer mas
- OpenAI se asocia con Jony Ive para crear la próxima generación de dispositivos con IA
- OpenAI da señales de estar construyendo su propia red social
- OpenAI Academy: cómo son los cursos gratuitos que enseñan Inteligencia Artificial paso a paso