De un mundo plano, a “Deep Payments”
Cómo una nueva forma de globalización está redefiniendo los pagos transfronterizos.
Por Veronica Pinazo, Chief Operations Officer en D24.
A medida que el mundo se desplaza hacia rutas comerciales alternativas, las fintechs, las empresas de pagos, los comerciantes y los bancos deben prepararse para la nueva era de “deep payments”. Veronica Pinazo comparte sus ideas sobre los tres bloques fundamentales que se requieren para que el sector fintech y las empresas de pagos se preparen para este gran cambio disruptivo.
Deep payments: el futuro de los pagos globales y su impacto en el comercio transfronterizo
El mundo nunca ha sido tan plano. Las rutas comerciales de hoy tienen poco que ver con la geografía o la distancia física. América Latina, por ejemplo, representa un tercio de las exportaciones globales de automóviles y motocicletas de India (lo que representa $1.79 mil millones en ventas), mientras que las exportaciones de todos los productos de India a Brasil ($6.48 mil millones) son más altas que las de socios comerciales vecinos como Japón ($6.18 mil millones) y Tailandia ($5.7 mil millones).
Otro ejemplo es China. Según el Foro Económico Mundial (WEF), el comercio entre China y la región LAC (Latinoamérica y el Caribe) creció 26 veces entre 2000 y 2020, de $12 mil millones de dólares a
$315 mil millones de dólares y gran parte de este crecimiento surge de la llamada economía ‘tangible’ como el comercio electrónico.Empresas chinas de comercio electrónico como Temu y Shein han tomado el mercado latinoamericano rápidamente. Brasil ya representa el mayor mercado de Shein impulsado por su fórmula de productos asequibles e incentivos fiscales. Durante la próxima década, se espera que dichos servicios representen una parte importante de todo el nuevo comercio internacional, con la mayor parte de esto entregado digitalmente.
Para aprovechar el comercio transfronterizo y facilitar nuevas rutas comerciales alternativas, bancos, fintechs y empresas de pagos transfronterizos se han convertido en pioneros en colaborar para construir las bases tecnológicas. El incentivo es claro; se espera que los pagos globales se disparen de $190 billones de dólares en 2023 a unos asombrosos $290 billones de dólares para 2030, según el Banco Central Europeo.
Se espera que las transferencias internacionales aumenten un 5% cada año, impulsadas por las poblaciones previamente no bancarizadas que ahora están accediendo a herramientas financieras modernas por primera vez. Los pagos internacionales son el motor de la economía global, facilitando el comercio y ayudando a impulsar la prosperidad.
¿El punto delicado? Los pagos internacionales son complicados. Hay 195 países, cada uno con sus propios sistemas de pagos, regulaciones y niveles de madurez tecnológica. Debido a la complejidad, las empresas de pagos globales con posibilidades de éxito deben adoptar una nueva categoría de pagos: deep payments. A medida que entramos en esta nueva era, las empresas de pagos globales deberán tener experiencia en los siguientes tres pilares esenciales.
Interconectar sistemas a nivel global sólo es posible cuando se tienen socios comerciales cercanos, buenas relaciones y pueden colaborar de manera efectiva. Esto significa conocer y confiar en los socios y tener relaciones sólidas y establecidas en todos los extremos de la transacción, desde comerciantes hasta bancos, corredores, intermediarios y reguladores. Es una paradoja que puedo confirmar por experiencia: a medida que aumenta el nivel del comercio electrónico transfronterizo, también lo hace la importancia de las relaciones personales en todos los extremos de la transacción.
Fintechs, bancos y otros intermediarios deben innovar juntos para resolver los complejos problemas de los pagos transfronterizos y establecer una plataforma saludable con el fin de llevar nuevos productos al mercado más rápidamente. La Banca como servicio es un ejemplo de una innovación que está dando forma al futuro de las finanzas.
El comercio digital, desde ventas de software hasta transmisión de películas, juega su papel más importante que nunca en la economía global; pero todo depende, en última instancia, de mecanismos de pago fluidos, rentables y transparentes a través de los cuales se puedan asegurar todos estos intercambios. Y esto nunca ha requerido niveles más cercanos de colaboración.
En segundo lugar, y otra paradoja de la globalización, es la presunción de que todos los consumidores se comportan de la misma manera en todo el mundo. En el caso de los pagos, nada puede estar más lejos de la verdad. Tomando América Latina como ejemplo, mientras que la economía de Ecuador se basa en el dólar estadounidense, que define todo, desde los precios hasta los mecanismos de pago, en Brasil con PIX, el Banco Central del país está liderando el mundo con su propio sistema de pago en línea en moneda local.
Y eso sin mencionar la adopción de la criptoeconomía en El Salvador. Cada una de estas políticas, junto con los hábitos y tendencias de los consumidores, crea un conjunto distinto de prácticas, expectativas y hábitos de pago; los cuales todos son igualmente relevantes si la transacción es transfronteriza.
Las empresas de deep payments deben ser expertas en el ecosistema fintech, con un conocimiento profundo de los patrones de compra de los consumidores, los movimientos corporativos y la evolución de la tecnología. Tendrán un conocimiento profundo de los nuevos modelos de negocio y operaciones, junto con el acceso a los principales actores del ecosistema.
El tercer pilar esencial para una empresa de pagos profundos es el uso y desarrollo continuo de tecnología inteligente, y esto es de vital importancia. Las empresas de deep payments deben innovar constantemente para enfrentar el desafío de construir sistemas más inteligentes, convenientes y eficientes, mientras apoyan a los bancos y mantienen a los consumidores seguros contra los fraudes en línea.
La incorporación de la Inteligencia Artificial (IA) y otras innovaciones para asegurar pagos rápidos, seguros y precisos será la solución revolucionaria para proteger los datos de los clientes y prevenir fraudes. El aumento de las transacciones digitales ha incrementado inevitablemente el riesgo junto con la creciente amenaza del fraude en línea.
La IA y el Aprendizaje Automático (ML) ofrecen la capacidad de analizar rápidamente grandes cantidades de datos, emplear modelos predictivos e identificar patrones de comportamiento inusuales en tiempo real, lo que significa que pueden descubrir rápidamente transacciones sospechosas mientras automatizan la conversión de divisas y aseguran controles de cumplimiento en los pagos transfronterizos.
La IA y el ML ofrecen un gran potencial para transformar la experiencia del cliente y las ofertas de productos para los comerciantes de comercio electrónico. Estas tecnologías agilizan los procesos de pago recurrentes, analizan datos de uso para comprender el comportamiento del cliente y proporcionan información predictiva sobre precios. La tecnología de IA mejora la experiencia del carrito de compras en el comercio electrónico, proporcionando personalización al analizar el historial de navegación y compra para sugerir productos complementarios y ofrecer descuentos atractivos para fomentar las compras.
Agiliza el proceso de pago y reduce las tasas de abandono del carrito, mientras completa automáticamente la información del cliente y proporciona múltiples opciones de pago relevantes para su ubicación. Las herramientas impulsadas por IA, como los chatbots y los asistentes virtuales, pueden manejar eficientemente las consultas de los clientes durante el proceso de pago mediante el uso de procesamiento de lenguaje natural para resolver problemas relacionados con pagos de manera rápida y rentable.
Las capacidades de IA también son activos valiosos para los comerciantes con negocios de suscripción, ofreciendo soluciones efectivas para la gestión de la rotación y los pagos recurrentes. Al aprovechar la IA, un negocio basado en suscripción puede predecir la rotación, implementar estrategias de retención personalizadas y automatizar la comunicación con el cliente.
Con la mayoría de las empresas preparándose para vender a nuevos países en los próximos dos años, las rutas comerciales alternativas están creciendo. Las microempresas se están internacionalizando, con emprendedores individuales vendiendo a múltiples países. La tecnología y las nuevas herramientas digitales están permitiendo a las empresas de cualquier tamaño vender a clientes en cualquier parte del mundo.
Como resultado, el sector fintech sigue en auge. La rápida digitalización de los pagos en todo el mundo, los avances en automatización, IA y tecnologías Blockchain, se espera que transformen aún más la experiencia del cliente y las ofertas de productos en los próximos años.
Con soluciones impulsadas por IA haciendo todo esto posible, estamos comenzando a ver la comoditización de la IA en fintech, asegurando que los pagos globales se vuelvan más disponibles y asequibles. Esto está llevando a una mayor competencia e innovación de la industria fintech, todo lo cual beneficiará en última instancia a los consumidores.
La globalización se está redefiniendo en torno a rutas y ejes alternativos; y los deep payments representan un nuevo conjunto de criterios que el ecosistema financiero tendrá que considerar para alcanzar su verdadero potencial. O como el propio Thomas Friedman podría haber dicho: ¡El Mundo (de los Pagos) es Profundo!