¿Adiós al efectivo? Tapi lanza tapipay para digitalizar los cobros en todo México
La solución permitirá a empresas de todos los tamaños cobrar a través de múltiples medios, incluyendo transferencias, tarjetas y pagos en efectivo.
En México, más del 80% de las pequeñas y medianas empresas aún depende del efectivo para cobrar sus servicios, según datos del Banco de México lo que representa un desafío para la digitalización financiera, pero también una oportunidad que empresas como Tapi están decididas a aprovechar. Con el lanzamiento de tapipay, su nueva solución de cobranzas presentada recientemente, la fintech busca democratizar el acceso a la red bancaria y a los canales digitales de pago, permitiendo que negocios de cualquier tamaño desde colegios, aseguradoras hasta inmobiliarias y comercios locales puedan cobrar por todos los medios que antes estaban reservados para grandes corporativos.
“Queremos dar el mismo acceso a las pequeñas empresas que tienen las grandes”, afirmó Tomás Mindlin, CEO y cofundador de Tapi, en entrevista exclusiva con IT Sitio “Hasta ahora, solo las corporaciones con miles de transacciones mensuales podían acceder a esta infraestructura; con tapipay, cambiamos eso”.
Tapipay responde a una necesidad recurrente que la compañía detectó durante su crecimiento y es que muchas empresas medianas y pequeñas (colegios, inmobiliarias, compañías de crédito, aseguradoras, servicios de suscripción) no tienen acceso a la infraestructura que permite cobrar de forma masiva y automática. El CEO y cofundador de Tapi, asegura que la red de canales tarjetas, transferencias, adhesiones, conciliación automática y puntos de efectivo “quedaba 100% exclusiva para empresas grandes por lo que tapi buscar dar el mismo acceso a todas las empresas de México.”
¿Qué hace tapipay y por qué es importante?
Tapipay es, en esencia, una plataforma de cobranza integral que conecta a una empresa con la red bancaria y con más de 30 mil puntos de venta físicos para permitir tanto pagos digitales como depósitos en efectivo; automatiza el envío de ligas de pago por WhatsApp, correo o SMS; habilita cobros con tarjetas, transferencias y adhesiones recurrentes; y centraliza la conciliación para reducir trabajo manual. “Queremos darle las mismas herramientas para que la parte de cobrar al menos ya esté 100% resuelta en una sola solución”, expresó Mindlin.
En el anuncio oficial y en coberturas recientes, la compañía señaló que la automatización de cobranzas puede alcanzar reducciones significativas en costos operativos (se mencionó una cifra de hasta 30% en costos y automatización de hasta 80% de los procesos de cobranza en algunos casos), datos que explicitan el valor económico detrás del producto para PYMES que operan con márgenes ajustados.
Reportes recientes aseguran que aunque el uso de banca móvil y transferencias creció notablemente, el efectivo sigue muy presente en compras pequeñas, pues más del 80% de adultos continúa usando efectivo en micropagos, y solo una fracción posee tarjetas de crédito. Ese patrón crea una doble necesidad de soluciones digitales que además ofrezcan alternativas en efectivo para incluir al consumidor promedio.
Además, el mercado de pagos en México está creciendo de forma acelerada ya que el valor de pagos digitales superó cifras de dos dígitos en miles de millones de dólares en 2024 y las proyecciones para 2026 siguen siendo optimistas, impulsadas por e-commerce y el mayor uso de wallets y banca móvil. Ese crecimiento convierte a México en un objetivo estratégico para empresas como Tapi que buscan escalar su red de rieles financieros.
Movimientos estratégicos y sinergias
La llegada formal de Tapi a México y el lanzamiento de TAPIpay no son aislados en 2025 la empresa cerró movimientos relevantes en el país entre ellos, la adquisición de operaciones de Arcus (unidad de bill pay y cash-in/out relacionada con Mastercard), lo que fortaleció su acceso a canales físicos y operativos en territorio mexicano. Esa compra le dio a Tapi una base sólida para integrar puntos de efectivo y servicios de recaudación en su oferta. Mindlin mencionó que la adquisición y cómo esto encaja con la ambición de democratizar el acceso a la red bancaria.
Para el CEO, la estrategia comercial es ambiciosa pero asegura que pasar de las “menos de 200” empresas que hoy cobran a través de las redes bancarias a decenas de miles “queremos pasar esas 200 a las 30,000” empresas, apuntando especialmente a quienes tienen cobranzas recurrentes y a sectores como créditos, seguros, colegios, inmobiliarias, clubes y suscripciones.
Mindlin subrayó que gran parte del ahorro proviene no solo de tarifas más competitivas al acceder a la infraestructura que Tapi ya opera para grandes fintechs, sino de la automatización de procesos operativos: envío de recordatorios, conciliación automática, notificaciones y rutas de pago simplificadas que liberan horas humanas valiosas dentro de las empresas. Es decir, menos personal dedicado a perseguir pagos y más tiempo para operar el negocio.
Aunque el escenario es prometedor, la transición implica retos como la heterogeneidad regional del uso del efectivo, una necesidad de confianza por parte de las PYMES en nuevas plataformas y la competencia de ecosistemas ya instalados (Mercado Pago, Nubank, bancos tradicionales y jugadores locales con soluciones de cobro) obligan a Tapi a combinar agresividad comercial con soporte y adaptaciones locales




