El robot líquido que redefine la robótica del futuro.

Avances en robótica blanda: crean un robot líquido que puede cambiar de forma

Un equipo de investigadores en Asia desarrolló un robot microscópico hecho de ferrofluido magnético que puede modificar su forma para atravesar obstáculos. Las aplicaciones en salud y otras industrias podrían ser disruptivas.

josepiccini junio 5, 2025

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Lo que antes parecía propio del cine de ciencia ficción empieza a materializarse en los laboratorios. Un grupo de científicos en la Universidad Nacional de Seúl, en colaboración con investigadores de Taiwán, presentó un innovador robot líquido que recuerda inevitablemente al mítico T-1000 de Terminator 2, aunque con fines completamente distintos.

Este dispositivo, de apenas un centímetro, está construido con ferrofluido —una sustancia magnética compuesta por nanopartículas suspendidas en un líquido portador—, y es controlado por imanes externos. Esta combinación le permite alterar su forma para sortear obstáculos físicos, desplazarse a través de espacios estrechos e incluso unirse con otros robots similares.

El dispositivo, construido con ferrofluido, muestra una notable capacidad de adaptación y flexibilidad, lo que lo hace ideal para entornos complejos.

La principal ventaja de esta tecnología radica en su flexibilidad y adaptabilidad. Gracias a estas propiedades, los investigadores destacan su potencial para ser utilizado en entornos complejos donde otras herramientas fallarían, como por ejemplo el cuerpo humano. En el futuro, estos microrrobots podrían navegar por el torrente sanguíneo para llevar a cabo tareas de diagnóstico o tratamiento de manera mínimamente invasiva.

Aunque está lejos de tener el aspecto o las capacidades destructivas del personaje de la película, este avance marca un paso importante en el desarrollo de robótica blanda —una rama que busca emular las propiedades de organismos vivos para crear soluciones más versátiles y seguras—. Además de la medicina, las posibles aplicaciones incluyen sectores como la ingeniería, la industria aeroespacial y la automatización en entornos extremos.

A medida que esta tecnología se perfeccione, podríamos estar ante una nueva generación de robots que operen en lugares antes inaccesibles, abriendo el camino a una transformación profunda en cómo concebimos la intervención tecnológica en distintos ámbitos de la vida.