Dispositivos

Adiós a los pendrive y discos duros: Microsoft presentó un cristal indestructible que promete conservar datos por siglos

El gigante tecnológico avanza con Project Silica, una tecnología experimental que graba información en láminas de vidrio de cuarzo mediante láseres ultrarrápidos. El objetivo: acabar con la obsolescencia, el desgaste y los límites del almacenamiento digital.

Durante dos décadas, los pendrive USB, discos duros y tarjetas de memoria fueron sinónimos de almacenamiento personal. Fotos, documentos, videos o proyectos de trabajo encontraron allí su refugio portátil. Su bajo costo, tamaño reducido y facilidad de uso los convirtieron en herramientas indispensables para millones de personas en todo el mundo.

Pero con el paso del tiempo, estos dispositivos revelaron una debilidad imposible de ignorar: se deterioran, se dañan y se vuelven obsoletos. Los conectores pierden contacto, los chips se desgastan y los sistemas de lectura fallan sin previo aviso. Un archivo guardado hace cinco o diez años puede desaparecer de un día para otro, no por error humano, sino por el simple desgaste del soporte.

A esto se suma un enemigo silencioso: la obsolescencia de los formatos. Lo que hoy es estándar —un tipo de archivo, un puerto o un sistema operativo— puede volverse ilegible en apenas una década. La historia de la tecnología está llena de soportes olvidados: disquetes, cintas magnéticas, CD, DVD. Ahora, incluso las memorias USB y los discos duros podrían seguir el mismo destino.

Un cristal que desafía el tiempo

En este contexto surge Project Silica, el ambicioso proyecto de Microsoft Research que busca reinventar el almacenamiento digital desde su base física. La propuesta consiste en grabar información directamente sobre vidrio de cuarzo utilizando láseres de femtosegundos, una tecnología que permite modificar la estructura interna del material de forma permanente.

A diferencia de los sistemas magnéticos o electrónicos, el cristal no contiene partes mecánicas ni circuitos que puedan fallar. Cada archivo queda inscrito de manera definitiva en el interior del vidrio, en un proceso conocido como WORM (“Write Once, Read Many” o “escribe una vez, lee muchas”). Esto significa que la información no puede sobrescribirse ni borrarse accidentalmente: permanece intacta durante siglos.

Una sola lámina del tamaño de un DVD puede almacenar más de 7 terabytes de datos, superando la densidad de los discos duros o las cintas utilizadas en los centros de datos. Pero más allá de la capacidad, lo revolucionario es su durabilidad. Las pruebas de laboratorio muestran que estos cristales son resistentes al calor, la humedad, la radiación y los campos magnéticos, factores que degradan fácilmente los soportes convencionales.

Adiós a los pendrive y discos duros: Microsoft presentó un cristal indestructible que promete conservar datos por siglos
Una sola lámina del tamaño de un DVD puede almacenar más de 7 terabytes de datos

Sostenibilidad y eficiencia: el otro gran argumento

Además de su resistencia, el vidrio de cuarzo tiene otra ventaja crucial: su sostenibilidad. Es un material abundante en la naturaleza, no tóxico y con un proceso de producción más limpio que el de los dispositivos electrónicos tradicionales.

En un momento en que el mundo genera más de cientos de zettabytes de datos al año, el impacto ambiental del almacenamiento digital se ha convertido en una preocupación creciente. Los grandes centros de datos —que operan miles de servidores y discos duros— consumen cantidades masivas de energía solo para mantener los archivos accesibles y refrigerar los equipos. Según estimaciones del sector, hasta el 80 % de la nube global se utiliza como almacenamiento, un gasto energético y ecológico enorme.

Con Project Silica, Microsoft propone una alternativa de bajo mantenimiento: un soporte que no necesita electricidad para conservar los datos y que elimina la necesidad de reemplazar dispositivos cada pocos años. En teoría, esto podría reducir drásticamente los costos operativos de los centros de datos y las emisiones asociadas a la producción y el reciclaje de hardware.

Un futuro sin copias de seguridad

Para usuarios individuales, empresas e instituciones, el concepto de “almacenamiento eterno” cambia por completo las reglas del juego. Ya no sería necesario hacer copias de seguridad periódicas, ni trasladar archivos a nuevos discos o servicios en la nube. Una vez grabado, el contenido podría preservarse sin mantenimiento durante siglos.

Museos, universidades, bibliotecas y archivos nacionales son los principales interesados en esta tecnología. Para ellos, Project Silica ofrece una solución definitiva para preservar documentos históricos, investigaciones científicas o material audiovisual sin riesgo de pérdida o degradación.

“Cada año generamos más información de la que podemos gestionar con seguridad. El reto ya no es almacenar, sino conservar de forma confiable”, explicó un vocero del proyecto. En otras palabras, la meta es que el conocimiento humano —en su forma digital— no dependa de soportes frágiles ni de infraestructuras obsoletas.

Adiós a los pendrive y discos duros: Microsoft presentó un cristal indestructible que promete conservar datos por siglos
La tecnología podría marcar el final de las memorias USB y los discos duros

El principio del fin para las memorias portátiles

Aunque Project Silica todavía está en fase experimental, el camino parece inevitable. Así como dejamos atrás los disquetes, los CD y los DVD, todo indica que también nos despediremos de las memorias USB y los discos duros en los próximos años.

La transición será gradual. Todavía necesitamos estos dispositivos para tareas cotidianas: transferir documentos, guardar fotos o respaldar trabajos. Pero el futuro del almacenamiento apunta hacia soportes más estables, ecológicos y autónomos, capaces de trascender generaciones.

En un mundo donde la información crece sin límites, el cristal podría convertirse en el nuevo guardián de nuestra memoria digital. No se trata solo de almacenar datos, sino de garantizar que sobrevivan al tiempo, a los cambios tecnológicos y a nosotros mismos.

Leer más

Autor

[mdx-adserve-bstreet region="MED"]

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba