La transformación digital provocará un ingreso de 1.36 miles de millones
La decisión de compra de un coche nuevo se basa más en la tecnología que éste incorpora que en rendimiento del motor. En el estudio “El Vehículo Conectado”, realizado por Accenture a conductores de doce países, se ha puesto de manifiesto que el crecimiento de los automóviles conectados supone un aspecto para la diferenciación y la venta, pero también es un reto para los fabricantes de coches, pues deben estar al día de las demandas de los clientes.
La «Densidad Digital» de un país está determinada por un sistema de puntuación que comprende más de 50 indicadores, como el volumen de las transacciones efectuadas en línea, el uso de la nube u otras tecnologías para agilizar los procesos; la presencia dominante de las habilidades tecnológicas en una empresa, o la aceptación de una economía con nuevos modelos de negocio impulsados de manera digital.
“El desarrollo de las economías basadas en el conocimiento enfatiza la importancia de la innovación y de los recursos digitales, como fuentes de productividad y crecimiento sostenible en el largo plazo. La competitividad y prosperidad de los países, sólo pueden mantenerse a través de la generación y adopción de los cambios tecnológicos”, señala Juan Manuel Pinedo, Director de Estrategia de Accenture México.
De este modo, la consultora explica que en cinco años se elevarían 0.25 puntos porcentuales las tasas de crecimiento del PIB en las economías avanzadas y 0.5 puntos porcentuales en las economías emergentes, un importante impulso para las economías avanzadas que luchan por aumentar el desarrollo.
Según el análisis, Holanda se ubica con la densidad digital más alta, seguido de Estados Unidos, Suecia, Corea del Sur, Reino Unido y Finlandia.
Como muchas empresas se esfuerzan por aumentar su crecimiento y la competitividad, el índice también se puede utilizar para identificar los «puntos digitales sensibles» que señalan dónde es mejor ubicar las diferentes operaciones de una organización en función de las fortalezas digitales comparativas de esa ubicación.
Aunque las acciones necesarias para permitir una mayor eficacia digital en las compañías pueden variar según las diferentes geografías, hay cuatro recomendaciones que acelerarían esta transformación:
1. Integrar la transformación digital a la agenda de los negocios: Si se tiene en cuenta que el 90% de las empresas en México tienen acceso a tecnologías digitales, los tomadores de decisiones deben trabajar en conjunto para aprovecharlas y transformar así a las corporaciones que dirigen.
2. Crear mercados digitales: Como los límites tradicionales de la industria se desvanecen, los gobiernos tienen que centrarse en proteger a los consumidores y a su vez colaborar con las compañías para entender los nuevos modelos de negocio y habilidades requeridas en el entorno actual.
3. Operar las empresas de manera digital: Es determinante que las instituciones integren el diferenciador digital en su estrategia para acelerar la transformación de sus operaciones, dinamizar la cadena de suministro y desarrollar nuevos canales para servir a sus clientes; además de implementar herramientas de análisis de información y nuevas tecnologías para profundizar la relación con ellos.
4. Gestionar entornos favorables: Si bien la infraestructura ―como la súper banda ancha y la banda ancha móvil― es importante para el crecimiento digital, los gobiernos también deben centrarse en facilitar a los empresarios el uso de tecnologías digitales para iniciar negocios, racionalizar el marco regulador, buscar formas innovadoras de crear las capacidades adecuadas en el talento y apoyar la confianza entre los ciudadanos y las empresas.
