Siete consejos para maximizar el cloud computing
Al momento de decidir por un servicio en la nube, lo ideal sería tener en cuenta los siguientes puntos:
– Lograr que el usuario considere el Software como servicio (SaaS): la rapidez e inmediatez asociada a la nube en términos de innovación es incomparable con cualquier otro tipo de despliegue en la empresa. La experiencia del usuario es clave para aceptar el software desde la nube.
– Establecer una buena estrategia de Plataforma como servicio (PaaS): Las organizaciones no tienen por qué renunciar a la utilización de las soluciones que tienen ya desplegadas, a las que pueden seguir enriqueciendo con nuevos add-ons y sobre las que desarrollar nuevas aplicaciones, por ejemplo, si adoptan una innovadora plataforma cloud. No obstante, existe el riesgo de que los desarrolladores hagan un mal uso de la plataforma y no aprovechen la naturaleza multitenant del sistema en su conjunto. Por poner un ejemplo, los comerciales necesitan acceder a cifras de ingresos y datos financieros clave, datos de compras, así como a información del estado de producción sin tener que alternar entre programas.
– Infraestructura como servicio (IaaS): aplicaciones en la nube. Partiendo de la base de que la transición a la nube en las empresas, por lo general, se realiza de forma gradual, es importante plantear una estrategia clara y bien diseñada que ofrezca la posibilidad de contar con una infraestructura cloud organizada de tal manera que no cree conflictos con las soluciones cloud.
– Mejorar la integración: A mayor diversidad de productos de diferentes proveedores de software, mayor es la probabilidad de que las dificultades para la corporación aumenten. A pesar de esto, incluso si se utilizan varias soluciones cloud, deber ser posible ejecutar diagnósticos e informes, recopilar datos de medición y hacer frente a los mensajes de error a través de toda la gama de productos. Es aquí donde la integración debe ser coherente.
– Seguridad: tener en cuenta dónde se almacenan los datos. Sobra decir que es crítico para una organización mantener la seguridad y la privacidad de los datos, entre otras cosas por el debate y las preocupaciones que surgidas en relación al caso de la NSA. Aunque los centros de datos de SAP cumplen con las normas de seguridad más estrictas, las corporaciones también deben tener políticas claras y bien definidas en relación a dónde se almacenan los datos, cómo se transmiten y qué les sucede cuando se cambia de partner cloud.
– Nube pública: En este modelo el proveedor cloud opera una infraestructura y ofrece a los clientes acceso a las aplicaciones a través de Internet. El interés aquí se centra en la rentabilidad. La mayoría de los sistemas de software empresarial tienen una arquitectura mutitenant. Sin embargo, el objetivo de la mayoría de los proveedores de cloud pública es proporcionar la máxima escalabilidad, lo que limita la capacidad de sus clientes para adaptar sus procesos de negocio. La alternativa más orientada al cliente permite un amplio abanico de opciones de configuración, pero, en ambos casos, los clientes en general tienen prohibido el acceso al código del programa. Si esta opción estuviera disponible podría generar nuevos niveles de complejidad afectando de forma negativa a los ciclos de entrega, al rendimiento y a los tiempos de respuesta. Crear un modelo híbrido que garantice un alto grado de escalabilidad, una solución multitenant segura y opciones de configuración, puede ser una solución.
– Nube privada: En la nube privada, las empresas se benefician de todas las ventajas de la nube, pero dentro de su firewall corporativo. La nube privada puede manejarse tanto internamente como por un proveedor de servicios cloud externo. Lo importante aquí es saber qué nivel de innovación se puede esperar y qué beneficios reales proporciona la nube privada al negocio. En la práctica, el enfoque más común es el modelo de nube híbrido, una mezcla de público y privado, y -como la experiencia demuestra- de las soluciones on-premise tradicionales.