Smartwatch vs. anillo inteligente: cuál conviene para monitorear la salud y el bienestar
Los smartwatch y los anillos inteligentes se consolidaron como aliados clave para el cuidado de la salud. Ambos registran actividad física, sueño y métricas biométricas, pero difieren en precisión, comodidad, funciones deportivas y uso cotidiano, lo que hace que la elección dependa del perfil de cada usuario.
Los relojes inteligentes se destacan por su enfoque integral: incorporan acelerómetros, sensores ópticos, GPS y algoritmos avanzados para medir pasos, frecuencia cardíaca, calorías y métricas de rendimiento. Son especialmente útiles para entrenamientos activos, ya que permiten ver datos en tiempo real, registrar rutas y acceder a funciones adicionales como notificaciones, llamadas y apps, aunque ciertas estimaciones —como el gasto calórico— pueden presentar márgenes de error.
Para mediciones más complejas, como el VO₂ máx, los smartwatch combinan datos fisiológicos con posicionamiento satelital y aprendizaje automático. Si bien ofrecen resultados cercanos a los de laboratorio, siguen existiendo variaciones. Aun así, su fortaleza está en el entrenamiento avanzado y la interacción directa durante la actividad física, algo clave para corredores, ciclistas y nadadores.
Los anillos inteligentes, en cambio, ganaron terreno por su comodidad y discreción, especialmente en el seguimiento del sueño. Al ubicarse en el dedo —una zona con buena irrigación— capturan con precisión pulso, temperatura corporal y variabilidad de la frecuencia cardíaca (HRV) durante la noche. Su diseño sin pantalla ni vibraciones mejora la adherencia al uso nocturno y facilita un análisis profundo de etapas del sueño y recuperación.
Además, los anillos suelen ofrecer puntuaciones diarias de preparación que sintetizan descanso, estrés y HRV en una lectura simple. Algunos modelos incluyen funciones avanzadas de salud femenina, como el seguimiento del ciclo menstrual y ventanas fértiles, convirtiéndose en una opción atractiva para quienes priorizan la monitorización pasiva y la privacidad por sobre la interacción constante.
Entonces, ¿cuál elegir? Para quienes buscan rendimiento deportivo, datos en vivo y conectividad, el smartwatch sigue siendo la opción más completa. En cambio, si el objetivo es un control continuo, cómodo y enfocado en sueño y recuperación, el anillo inteligente resulta ideal.
En Latinoamérica, por ejemplo, es posible encontrar múltiples marcas de smartwatch como Huawei, Samsung o Garmin, mientras que algunos comercios ya ofrecen el Samsung Galaxy Ring. A nivel internacional, el Oura Ring Gen3 se posiciona como una referencia en monitoreo avanzado de salud.
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